En la actualidad, recolocarse no significa comenzar desde cero. Según el Informe de Recolocación 2024 de Talent Solutions (ManpowerGroup), el 87% de los profesionales que pasan por un proceso de recolocación iguala o mejora sus ingresos previos, mientras que el 93% accede a un empleo en un nivel igual o superior al anterior. Además, un significativo 26% decide emprender tras completar el proceso, reflejando un notable aumento en la confianza personal que pasa del 32% al 97%.
Durante el verano, muchos trabajadores aprovechan para reflexionar sobre su trayectoria profesional y considerar nuevos retos de cara al nuevo ciclo laboral. Para quienes enfrentan desvinculaciones laborales, los programas de outplacement o recolocación se han convertido en una herramienta efectiva para regresar al mercado de trabajo con mayor claridad, propósito y energía renovada.
Los números son contundentes: el tiempo promedio para reinsertarse en el mercado laboral es de solo 3.5 meses, y casi un 30% lo logra en menos de tres meses. Sin embargo, la recolocación no se trata simplemente de encontrar un empleo, sino de orientar la carrera hacia objetivos más ambiciosos y concretos.
Hoy, la recolocación es una estrategia proactiva y no una opción secundaria. El talento se mueve, se adapta y toma decisiones con asesoría personalizada, dejando atrás la percepción negativa de un “plan B”. Este proceso no solo implica un cambio profesional, sino también un profundo crecimiento personal, pues la confianza en el propio desarrollo laboral crece considerablemente durante el acompañamiento.
Contrario al mito que asocia la reinvención profesional únicamente con la juventud, la edad promedio de quienes participan en estos programas es de 45 años, y un 62% supera los 40 años, lo que confirma que el talento senior está en constante transformación. Además, la distribución por género es equilibrada, con un 55% de hombres y un 45% de mujeres, mostrando igualdad en el acceso a estas oportunidades.
Respecto a sectores, la recolocación es común en industria, servicios, retail y tecnología, y se extiende también a áreas en evolución como banca, energía, farmacéutica y gran consumo. En términos geográficos, Madrid y Cataluña siguen siendo los principales focos, aunque otras regiones como Castilla y León, Comunidad Valenciana y Navarra están ganando relevancia. Resulta interesante que Madrid y el País Vasco hayan experimentado menos impacto comparado con años anteriores, reflejando mercados laborales más resilientes o procesos mejor manejados.
En resumen, el acompañamiento profesional se ha convertido en una herramienta clave para enfrentar el cambio laboral. El 96% de quienes participan en programas de recolocación valoran positivamente la experiencia, y el 94% la recomendaría. En un entorno laboral dinámico, contar con un soporte sólido puede marcar la diferencia para impulsar tu crecimiento y el de tu organización.
